¿Ha experimentado estar, permanecer en silencio?  En los tiempos que corren es difícil proporcionarnos momentos de silencio. La constante es el ruido, sonidos que vienen de todas partes, los teléfonos, los aparatos electrónicos, la televisión, la música en los centros comerciales, hacen cada vez seres aislados con imposibilidad para comunicarse, pero también con la incapacidad de pensar y de reflexionar acerca de sí mismo.Esto va muy de la mano con la destreza de estar consciente de si, esa capacidad tan humana, que nos permite actuar de manera coherente y responsable.

Veía recientemente a una niñita de 10 años jugar con su tableta, con la televisión encendida y con volumen considerable. Pensé, ¿qué es esa necesidad de tanto sonido, qué evita el ruido? Le invito a que se regale momentos de silencio, mientras realiza una tarea, mientras lee, mientras escribe, mientras platica con otra persona, probablemente va a descubrir esos sonidos que produce el silencio, que da sosiego a la vida, que permite disfrutar de mi compañía.

 

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