Bueno, le comparto que entonces vive una fantasía. Es imposible mantener el control y las personas que lo hacen responden a la necesidad de minimizar los riesgos y de ejercer el poder.
La persona que necesita controlar suele ser crítica y exigente tanto consigo misma como con los demás. Estas personas también suelen ser desconfiadas del entorno, por considerar que los demás son incapaces o tienen malas intenciones. Suelen provocar culpa en los otros, utilizan el chantaje emocional para lograr el objetivo de controlar a los demás. Pero sobre todo la persona con necesidad de control tiene una inseguridad profunda y es de donde viene su necesidad de mantener todos los frentes cubiertos. Cuánta frustración genera darse cuenta que esto no es posible y cuánto dolor y amargura en los demás.